Es mal amante la vanidad
Tengo sueño otra vez. Hoy solo hice una comida, pero comí mucho y bien. ¿Esto del ayuno intermitente será real o es una de esas estafas del wellness que nos tragamos cada cierto tiempo?
A veces me pregunto si sentir un hoyo en el estómago toda la mañana para luego babear del hambre desde un par de horas antes de comer, vale la pena. También pienso en si tendré un ligero desorden alimenticio. Tendría mucho sentido porque desde niño escuché a mi mamá hablar diario sobre su enfermiza obsesión por su peso. Si hubiera nacido mujer seguramente el daño sería más evidente.
Es mal amante la fama, canta Rosalía, pero creo que el verdadero enemigo es la vanidad. Está en todos lados, no solamente en nuestra imagen y cómo nos mostramos al mundo. La vanidad se lleva en la mente y se manifiesta de muchas formas. No es solo andar overdressed cuando vas a la tienda de la esquina. Es cómo le hablas a la gente de servicio y qué tan buena es tu relación de familia. Es cómo firmas los correos del trabajo y con qué tono das los buenos días a las personas que te topas en la calle.
Incluso decidir no dar los buenos días es un acto de vanidad en sí.
Hace unos días un amigo me decía que la clase media y pa'rriba está muy agringada en este país. Y le di la razón. Pero él utilizó esto como un argumento para explicar su postura pro Estados Unidos. Mientras que para mí, reconocer que estamos agringados solo incrementó mi repele hacia cierto país anglosajon porque viviendo en LATAM la realidad es que no tenemos mucha opción que digamos. Aprender inglés se ha vuelto una necesidad en el mercado laboral de mierda que tenemos y en vez de sumar puntos por saber el idioma, te resta y te descalifican de procesos por no saberlo. Antes era una opción pero se volvió una necesidad.
Al día siguiente nada de eso importó porque alguien que leyó este blog me envió un correo, y esa es una sensación de victoria que no puedo describir en este momento con palabras. Saber que alguien al otro lado del mundo me leyó y disfrutó mis palabras es algo invaluable para mí. Me hizo sentir en extremo agradecido. Freya, muchas gracias.
Hoy el post se trató de muchas cosas y de nada a la vez.
📩 Las mejores cosas de la vida suceden cuando decidimos conectar con los demás. Gracias por leer.